En el mundo globalizado en que vivimos hoy, la entretención juega un papel fundamental en nuestra vida cotidiana.
“Britain’s got talent”, MTV, Luna Nueva, Madonna, La nana, Metalica, American Idol, U2, Grammys, Cannes, Oscar…. Son, sin dudas, iconos inconfundibles de nuestros tiempos. Son imágenes de mundo, que nos alejan de nuestro día a día, que nos conectan con los más intimo de nuestro ser, ó que nos desconectan de nuestra rutina diaria. Mucho se ha cuestionado de ello: es la música, el cine y la televisión ¿arte?, ¿cultura?, ó ¿un producto más?
Las respuestas y cuestionamientos son variados, mientras que su desarrollo y renovación es contante. Estas tres materias -música, cine y tv- se engloban en el mundo de la entretención. El cual ha ido de la mano del hombre y de su historia, hasta nuestros días. Instantaneidad, tecnología y cercanía se ligan directamente a esta industria emergente y consolidada, la cual esta en constante proceso de extensión e innovación.
El séptimo arte, que se inició en 1895 y que se mantiene vigente hasta hoy, es una fiel imagen del proceso de evolución del hombre y la tecnología. Con los hermanos Lumière de pioneros, y con el cine en 3D como novedad, la industria cinematográfica se posiciona entre una de las preferencias permanentes en cuanto a cultura de entretención.
De hecho, en Chile, en los últimos dos años se ha producido un aumento en los espectadores del 10,4%, totalizando 11.886.801 espectadores a nivel nacional, durante 2008. Cifras que se enmarca en un constante crecimiento de la demanda cinematográfica nacional en los últimos años.
La innovación en cuanto a temáticas y calidad de imagen, son las principales exigencias dentro del mercado cinematográfico. El cual pertenece a un mercado estrechamente competitivo, donde sólo algunas empresas pueden traspasar las barreras que en éste existen. Barreras que se refieren aun tema netamente monetario, precisamente al alto costo que significa iniciar una empresa cinematográfica, y al financiamiento que se necesita para mantenerla activa. Además de los altos estándares de calidad que se enfrentan tanto por parte de la competencia como por las exigencias del publico.
A pesar de ello, la industria se amplía, si en sus inicios se pensó que solo Hollywood seria la pionera, hoy Bollywood toma partida, le siguen España y Latinoamérica.
Esta última, busca abrirse camino financieramente y un ejemplo de ello es la última propuesta de Ventana Sur – mercado cinematográfico latinoamericano organizado conjuntamente por el INCAA y el Marché du Film del Festival de Cannes- quienes pretenden vender películas del continente a todo el mundo, además de encontrar socios para coproducciones y establecer contactos con las grandes compañías que distribuyen cine.
En el marco de la región latina, Chile, aún se encuentra en pañales en cuanto industria cinematográfica se trata. Las producciones nacionales no alcanzan grandes audiencias y aún existe un sin número de producciones que no pueden ser distribuidas por falta de recursos, a pesar que existe una fuente de fondos concursables que subsidia las producciones nacionales.
De todos modos este año las producciones nacionales han tenido un repunte en calidad y reconocimiento internacional. Ejemplos como “La nana”, de Sebastian Silva, la cual fue premiada en el festival de Sundance y entre otros:
– Miami International Film Festival: Mención Especial del Jurado, Mejor Actriz, Catalina Saavedra Premio Jordan Alexander Ressler al Mejor Guión
International Film Guide Inspiration Award
– Fribourg Film Festival: Talent Tape Award
– Sarasota Film Festival: Mejor Película Narrativa
– Festival de Cine de Guadalajara: Premio FIPRESCI
Otros estrenos nacionales de este año fueron: Dawson, Navidad, Nicanor Parra (documental), que siguen la línea de Silva, que están generando un espacio más amplio al cine chileno.
Cabe señal que la industria nacional aún no esta en condiciones de ser comparada con una producción estadounidense como “Crepúsculo” o “New Moon”, o las producciones indo-británica como “Slumdog millionaire”, que son éxito mundial.
Estas producciones logran una cobertura total, se transforman en un sello que va desde la pantalla grande hasta la chica. La cobertura que logran se transforma en un producto altamente cotizados, que no se reduce al hecho de solo ser espectador sino que se amplia a productos complementarios como los CD de la banda sonora, marcas asociadas etc.
Realidad muy lejana a las producciones locales que no se extiende y que al contrario deben enfrentarse a la piratería ó al mercado negro, que está arraigado en la cultura de la zona.
La industria que se ha visto más afectada por la piratería es la musical. Este mercado ilegal representa el 2% del comercio mundial, cifras que lamentablemente van en aumento en el mundo entero.
La industria discográfica, en los últimos años, ha enfrentado una caída significativa en ventas, la cual ha llevado a buscar por todos los medios posibles una vía anexa de distribución y financiamiento.
La tecnología y los contantes avances, en cuanto a formatos musicales se refiere, han sido la principal problemática de esta industria, que de a poco se ha ido quedado en el pasado. La digitalización o tambien llamada desmaterialización de la música, ha hecho que los costos de producción y de distribución disminuyan considerablemente, por lo que tener una producción independiente se ha convertido en una tendencia creciente.
Los constos de producir música de calidad han caído, y así tambien los cosotos de difunción, pues hoy se cuenta con múltiples sistemas on line, que descargan desde un tema hasta discográficas completas. Además del sin numero de sitios donde se puede ver y escuchar lo que quieras gratuitamente.
La amenaza vigente y en alza, según las cifras nacionales e internacionales, son los acceso a tecnología de calidad y la piratería. La razón principal de la fuerte depresión de la industria discográfia es la falta de respuesta por parte de la industria al mercado musical, pues no supo reconocer los cambios a tiempo, ni adelantarse a las circunstancias que estaban envolviendo el mercado musical.
Hechos de los que todos somos testigos, y de los cuales se postula un cambio rotundo en cuanto a formato, así lo afirma Jorge León y Rico, en su libro: «La Industria musical y los derechos de autor». Donde hace un análisis de la crisis musical, desde el ámbito judicial y comercial.
Facebook, My Space, blogs etc… son medios que permiten la difusión fácil, rápida y gratuita de lo que el consumidor quiera, traduciéndose en una herramienta no sólo de consumo, sino de difusión para artista emergentes, como el caso de Lilly Allen o de Arctic Monkeys y Amy Winehouse.
La tecnología se ha convertido en el instrumento determinante del desarrollo discográfico. Por un lado permite y contribuye a su desarrollo, pero por otro es un peligro latente. Pues además de las sitios de descarga como Ares, E-Mule… entre otros, la industria no ha encontrado una forma de subsistir, como en sus inicios.
Por ahora, la única forma de financiamiento con la que cuentan los artistas son las presentaciones en vivo, las que reportan una entrada real y tangible para la subsistencia de una carrera musical.
Esta situación que engloba a la industria mundial, afecta al pequeño mercado discográfico que con dificultad se estaba desarrollando en Chile. La baja en las ventas, produce una crisis que afecta desde cantantes hasta sellos discográfico, los que de a poco van retirándose del mercado.
A pesar de la difícil situación, que actualmente la industria musical a nivel global enfrenta, son las presentaciones en vivo y la búsqueda de un nuevo formato de reproducción lo que mantiene viva a ésta industria. En nuestro país la situación no es diferente, la agenda de presentaciones en vivo esta copada y Sinergia ya lanzó su nuevo álbum en un formato distinto.
El mundo en sí se ha renovado, una serie de cambios en todo orden de cosas ha influido desde lo que vemos y hasta lo que escuchamos. Las diferencias están a la vista y la televisión no se podía quedar atrás en esta materia.
La revolución de la información y de la instantaneidad también llega a las TV. Las renovaciones la invaden tanto desde formato a contenido.
El formato era una iniciativa que se planteó en el 2000 y que concluyó éste año, con la elección de la norma japonesa-brasileña de televisión digital terrestre ISDB-Tb.
Este nuevo formato de televisión permite:
1. Transmite HDTV (Alta Definición) y un canal de TV Móvil para teléfono en mismo ancho de banda de 6 Mhz de TV normal.
2. Puede transmitir un canal de HDTV o tres canales de SDTV (Definición Estándar) por cada canal de TV.
3. Permite la televisión interactiva y descargar actualizaciones de firmware para el televisor.
4. Se puede recibir la señal con una simple antena sobre el televisor, sin la necesidad de instalar una antena externa.
5. Permite la transmisión de televisión para teléfonos móviles incluso cuando estos se desplazan a una velocidad de hasta 400 km/h.
El sistema japonés fue elegido primeramente por Brasil, lo siguió Venezuela, Argentina, Perú mientras que en Cuba, Bolivia y Paraguay, está en periodo de prueba. Este nuevo sistema significa un gran avance, pues los otros países están más desarrollados en esta área.
Este nuevo sistema significa un gran avance, pues los otros países como Japón, EEUU, se han decido mucho antes y están más desarrollados en esta materia, más oferta, más información y más calidad es lo que se pretende con esta media.
En cuanto a contenido la televisión es uno de los medios más cuestionados por la audiencia, pues desde sus inicios se le ha cargado una responsabilidad social. A pesar de ello la TV cuenta con fuente de control, pero ello no interviene directamente en una señal específica, sino que intenta mantener al margen a las casas nacionales principalmente.
En cuanto a tv internacional y temáticas, éstas se han desarrollado en amplitud, pues hoy existen más de 200 canales de tv-cable y se puede encontrar desde el canal del senado hasta Vh1.
Dentro de este esquema de programas y señales televisivas, los canales nacionales cuentan con una “parrilla” muy similar entre sí. Los mismos horarios, las mismas temáticas, por distintos canales. A diferencia de la linea de tv cable que cuenta con un variedad programatica amplía.
La industria nacional televisiva éste año se ésta renovando considerablemente, nuevas apuestas y cambios de casas televisivas, han sido el sello del segundo semestre. Ejecutivos y rostros claves cambiándo son la principal novedad. Además de las temáticas que han sido revelación como: las producciones dramáticas, la farándula, el fenómeno reality show y Los Simpson.
Estas tematicas han sido el Boom televisivo, ejemplos como: ¿Dónde esta Elisa?, «1810», SQP, han marcado pic de sintonia y han entrado ha remodelar la pauta nacional televisiva.
Las cifras reflejan las preferencias de las personas y aunque, mucho se cuestione el contenido de lo que se esta transmitiendo tanto por la Tv, por el cine o la radio, son los telespectadores quienes quieren y en definitiva manejan la industria de la entretención.
El eterno cuestionamiento de lo que se debe o no mostrar, de si es televisión abierta ,porque no entregar mejor calidad, de que sí se discrimina, no se educa etc… pero todo es parte del arte y del comercio. Un artista quiere expresarse y comunicar al resto, la industria pretende financiarse. Ambas se necesitan y aunque se tienden a confundir son materias que en el mundo de la entretención une y complementan.
Para que existan tres programas juveniles similares a la misma hora, es porque hay gente viéndolos; que Britney Spears alcanza el 1º lugar el Billboard, es porque tiene un público que la escucha , y si “2012″» fue éxito en taquilla, es porque tienes cientos de espectadores.
Pero los programas juveniles no dejan ninguna enseñanza, Britney fui acusada de playback y «2012» es en su mayoria efectos especiales. La lista suma y sigue, pero ¿hasta donde llega la entretención? ó ¿estamos hablando de arte? ó ¿cultura? ó ¿todo es un producto?
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